"Sugerencias" ("Meteoritos" 25/09/2005)

Con independencia del Centro Temático de los Sanfermines, el Ayuntamiento de Pamplona quiere sacar rentabilidad turística al recorrido del encierro, itinerario que los visitantes siguen, plano en mano, en cualquier época del año. La única aportación municipal hasta el momento ha consistido en la entronización de una imagen de San Fermín en la hornacina abierta hace casi un cuarto de siglo en el lienzo de muralla de la cuesta de Santo Domingo. Sugerencias a la concejala Otamendi, por si quiere tomar nota. Corrales del Baluarte de Rochapea- Colocación se seis miuras de la Feria disecados por taxidermista (se podría mantener un grupo vivo de cabestros bien mansos para dar más realismo al ambiente). Plataforma y cohete para que los turistas imiten a Ignacio Aldaz tal como sale por la tele. Santo Domingo- Junto a corrales, “La venta de los mayorales”: taquilla, refrigerio y recuerdos. Alquiler de periódicos enrollados para cantar la copla. Sensores olfativos para oler a miedo. Plaza Consistorial- Acceso al balcón del chupinazo, dotado de plataforma, cohete y escultura animada de la alcaldesa Barcina, que sonría y agite el pañuelo rojo. Curva de Mercaderes- Alquiler de zapatillas para comprobar el efecto del antideslizante en suelo de adoquín mojado. Estafeta- Encierro simulado con toros disecados sobre ruedas. Esculturas diseminadas de corredores famosos junto a los que fotografiarse en actitud de carrera. Balcones del Hotel La Perla: esculturas de Heminway y Pablo Sarasate en calidad de espectadores. Emulación de la función de pastor mediante venta de polo y vara acreditativos. Callejón- Posibilidad de escurrirse por las gateras. Plaza- Gymkhana para sortear pastores y dobladores, con meta en la puerta de corrales. Meseta de toriles- Tribuna desde la que Madina imparta doctas charlas sobre el modo de correr el encierro de Pamplona. Sin ponerse como ejemplo. No por mal ejemplo, sino por su humildad innata. Los turistas reproducirían finalmente el recorrido interior de los morlacos hasta quedar enchiquerados para la corrida, con inclusión del rito del sorteo previo al apartado (sorteo en este caso de importantes premios entre los billetes adquiridos en Santo Domingo). Los aledaños del recorrido del encierro ofrecen también posibilidades de explotación turística. Grupos de jubilados podrían alternarse en el canto y baile del vals de Astráin a lo largo de la calle Mayor (la alcaldesa en traje de gala aparecería por sorpresa), de modo que condujeran a los visitantes hasta la Parroquia de San Lorenzo y, por consiguiente, a la capilla de San Fermín, donde un pack de pañuelo rojo y vela sería susceptible de quedar depositado como ofrenda perpetua al Patrón en verjas metálicas habilitadas al respecto. No renuncio al copyright.

Autor: Carlos Pérez Conde (Publicado en "Diario de Noticias" de Navarra el domingo 25 de septiembre de 2005).

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