sábado, noviembre 19, 2005

Comentario: Club de las 7 (18/11/2005)

La Iglesia católica tiene sus propios medios de comunicación: su propia prensa, su propia cadena de radio y su propia cadena de televisión. También en Navarra.

Suyos en el más posesivo sentido del término, porque no consta que tenga intención de ceder espacios a otras Iglesias, a otras confesiones; ni siquiera a las que cuentan con seguidores en nuestra Comunidad Foral.

Como los púlpitos clásicos aleccionan a oyentes ya aleccionados, feligreses de cuerpo presente y pensamiento ausente, la Iglesia predica también desde los modernos púlpitos de la sociedad de la información. Igual que en los templos, hay predicadores de modales suaves en sus firmes convicciones y otros vehementes en las formas y catastrofistas en el fondo.

La tirada del semanario diocesano es humilde y la audiencia de la televisión de la Iglesia se asemeja a la baja asistencia media a los templos.

Consciente de la influencia social de la televisión, la Iglesia católica navarra ha presentado la Fundación Medios de Comunicación “Juan Pablo II”, creada, según palabras de Monseñor Sebastián, para contribuir a una presencia “activa y eficaz” de la Iglesia en los medios de comunicación, especialmente en la televisión. La Iglesia, de acuerdo con el testimonio del Arzobispo, quiere una televisión y unos medios de difusión modernos y democráticos, abiertos al debate y no en contraposición con lo que ya existe. Es curioso cuando la tele de los Obispos tiene programas dedicados a censurar el desarrollo de programas ajenos, cuando plantea un debate nacional como el modelo de debate con menosprecio específico de otro concreto en la tele pública, y cuando sienta por costumbre en mayor número a interlocutores de su cuerda.

Uno de los objetivos principales de la Fundación será la recogida de fondos para impulsar el trabajo de los medios de comunicación de la Iglesia, sobre todo la emisora de televisión Popular TV-Navarra. Que el cepillo llegue a donde no lleguen los ingresos por publicidad. Uno de los patronos de la fundación es el presidente de los empresarios navarros. Eso sí, a título particular. La Iglesia católica ha sabido siempre a qué puertas llamar.

Autor:
Carlos Pérez Conde ("Comentario" del "Club de las 7" de la Cadena SER en Navarra).