lunes, noviembre 14, 2005

Comentario: Club de las 7 (14/11/2005)

Paciencia es la consigna.

Más paciencia todavía, tendría que haber precisado el consejero de Obras Públicas del Gobierno de Navarra a la vista del escalofrío de los datos correspondientes a la siniestralidad en la Nacional 121-A, Pamplona-Francia por Endarlatza.

Álvaro Miranda suele admitir que tal vez la autovía de Dos Hermanas y Leizarán no fue la mejor idea para conectar Pamplona, San Sebastián y Francia con una vía de alta capacidad, pero los navarros queríamos llegar rápido y seguro a la Costa Vasca y el Gobierno de Navarra puso manos a esa obra emblemática de las comunicaciones viarias navarras.

Sin embargo, la N-121-A pasa a ser ruta recomendada por las propias autoridades forales cuando la nieve cierra las fuertes pendientes de la A-15; por nieve unas veces, por vehículos pesados cruzados en la calzada otras. Esos días de inclemencias meteorológicas, la N-121 se reivindica como ruta alternativa.

Los túneles de Velate y el buen estado de esa vía hasta Sumbilla estimulan su utilización. Pero, a partir de ese punto empiezan los problemas: trazado estrecho, sinuoso y congestionado, con mucho tráfico pesado: camiones que trabajan para factorías de la zona y algunos que desestiman la A-15. En días de lluvia, mal asunto.

Como la A-15 y la autovía de Sakana conectada con la nacional 1 y Echegárate reformado, son caminos que llevan a San Sebastián, la N-121 está pagando la servidumbre de tantos miles de millones invertidos en cemento y asfalto. Es difícil de justificar una triple y multimillonaria inversión en un mismo cuadrante de nuestro territorio. Pero a lo hecho, pecho. La demora en afrontar la necesaria mejora de todo el tramo norte de la N-121-A se está pagando en vidas humanas a un costo muy alto. La fibra sensible se excitó mas si cabe la semana pasada al morir una joven embaraza: dos vidas en una muerte.

El consejero Miranda pide a los usuarios y a los vecinos de la zona que aguanten un poco, que la reforma pendiente se acometerá en breve. Desde la zona meten prisa, agobiados por la inseguridad y los accidentes, y adelantan, con razón, que quizá la reforma, aun ya inexorablemente tardía, nacerá corta para las necesidades futuras.

Si España hubiera tenido antaño el ancho de vía europeo y si Navarra no siguiera aislada por vía férrea, una cultura del transporte de mercancías en tren hubiera aliviado estos graves problemas.

El consejero Miranda suele presumir no sólo del cumplimiento sino incluso del adelanto de los plazos de entrega de Obras Públicas. En la N-121-A, Pamplona-Francia por Endarlatza, habría que adelantar los plazos de inicio para adelantar los de terminación. Y alimentar la paciencia con el esfuerzo de la anticipación.

Autor: Carlós Pérez Conde ("Comentario" del "Club de las 7" de la Cadena SER en Navarra).