Comentario: Club de las 7 (28/09/2005)

Nada tan aleatorio como un informe, susceptible de ser interpretado a plena satisfacción por los antagonistas interesados en su contenido.

Ejemplo reciente: informe del Consejo de Europa sobre la aplicación en España de la Carta Europea de las Lenguas Regionales o Minoritarias. Una recomendación en el caso de Navarra: la protección del euskera en la zona mixta y el fomento de la lengua en programas de radio y de televisión.

Conocido el informe aprobado por el Consejo de Ministros de los países miembros, el director general de Política Lingüística ha expresado su satisfacción al sentir respaldada la legislación foral; Eusko Alkartasuna ha expresado la suya porque esa política lingüística ha sido puesta en evidencia, hasta el punto de que anda dando vueltas a la posibilidad de demandar al Gobierno Foral. Blanco sobre negro, negro sobre blanco. Alguien está equivocado en su interpretación.

Lo cual no ha sido impedimento para que el Parlamento de Navarra, con el aval de todos los grupos, UPN incluido, haya aprobado una moción de Aralar, presentada con motivo del Día Europeo de las Lenguas, animando a los ciudadanos a aprender los idiomas propios de Navarra y de Europa, instando a superar el monolingüismo y en apoyo del plurilingüismo.

Lo anterior puede ser tomado como buenas razones teóricas, pero las obras son amores y, en ese sentido, una sentencia firme del Tribunal Supremo ha rechazado un recurso del Gobierno y admite la denominación oficial de Orkoien escrita con ortografía en euskera; o sea, con k e i latina. El Gobierno llegó hasta el Supremo y éste señala que la competencia para decidir, como así hizo, y en la misma línea, corresponde al Tribunal Superior de Justicia de Navarra. Se da la circunstancia de que hasta los informes técnicos de la dirección de política lingüística eran favorables a esa denominación oficial.

Si el Consejo de Europa asume la vigente zonificación y, no obstante, recomienda la protección del euskera en la zona mixta, algo habrá echado de menos.

Agua de borraja: las mociones parlamentarias no son vinculantes para el Gobierno y el informe europeo irá al saco roto.

Autor: Carlos Pérez Conde ("Comentario" del "Club de las 7" de la Cadena SER en Navarra).